...y a tí te encontré en la calle.
Mi vecino dejó en la puerta de casa este pequeño mueble para que se lo llevara el camión de los trastos viejos. Yo lo recogí y le he dado otra oportunidad. Era blanco, tenía el sobre roto, y estaba increiblemente sucio. Agua y jabón, lija, un sobre nuevo, papel envejecido, pintura y cera...poco a poco va tomando otro aspecto. Ya le falta poco.